El politólogo Xabier Torrens destaca que, aunque con los políticos hay que ver cómo actúan en lugar de estar pendientes de sus discursos, la solución finlandesa que vaticinó hace más de un mes puede ser la más probable.
De este modo, Puigdemont, como el presidente de la República de Finlandia, se dedicará a la política internacional y, el resto de consellers y miembros del Govern de Cataluña, junto con su presidente o presidenta, ejercerán, como el Primer Ministo de Finlandia, como quienes implementarán y dirijirán todas y cada una de las políticas públicas de Cataluña.