Familiares de un trabajador fallecido por cáncer pulmonar han exigido ante los juzgados de Bilbao «justicia completa» y que la Seguridad Social reconozca el pago del recargo de prestaciones por falta de medidas de seguridad en la antigua Babcock Wilcox tras la muerte de su empleado, al que se le diagnosticó neoplasia de pulmón.
La asociación vasca de víctimas del amianto (Asviamie) ha acompañado a los familiares del trabajador fallecido y ha mostrado su apoyo a la demanda, además de exigir «más prevención y medidas de seguridad más rigurosas frente al riesgo y exposición a las múltiples sustancias cancerígenas».
Durante la concentración, la hija del trabajador fallecido ha afirmado que «la familia desea que se haga justicia completa y que las administraciones públicas respondan y se hagan cargo, sin tener que llegar a plantear demandas y juicios, para asumir las consecuencias que el proceso de industrialización supuso para la salud de los obreros».
Estos trabajadores, ha añadido, «trabajaron de forma directa y sin equipos de protección con materias nocivas para la salud, con causa de muerte» y, tal y como han podido averiguar, «incluso algunos de los equipos de protección, como delantales o los guantes contra el calor de las fundiciones, se fabricaban también con amianto».
A su juicio, si en su informe de 2020 relativo a este caso, Osalan «conoce y reconoce esta situación, si la propia empresa Babcok & Wilcox reconoce e indemnizó en su día por estos hechos, ¿por qué las administraciones y la propia Seguridad Social no lo asume y nos obliga a demandar? ¿No es suficiente daño ya perder a un padre, esposo o abuelo?», ha declarado la hija del fallecido.
Tras enfermar, el informe realizado con fecha de 13 de mayo de 2020 por el Hospital de Cruces, señaló como diagnostico neoplasia de pulmón con metástasis hepáticas. Fue en febrero de 2021, cuando el INSS reconoció a su viuda la pensión y las prestaciones correspondientes por muerte derivada de enfermedad profesional.
Además, y según recoge el informe de Osalan de 25 septiembre de 2020, «el trabajador podría haber estado expuesto al amianto de manera directa, por manipulación del mismo, o por la utilización de equipos de protección individual que lo contenía, e indirectamente al ser utilizado por otros trabajadores, o por liberarse al ambiente, al deteriorarse el amianto presente en las instalaciones y también podría haber estado expuesto a otros contaminantes presentes en la fundición, como polvo, humos, Sílice».
