La Comisión Mixta de Fiestas de Bilbao ha anunciado esta tarde los personajes más txirenes del Carnaval de Bilbao. El escritor Lutxo Egia y la txistulari Jasone Akizu serán, respectivamente Farolín y Zarambolas en 2024, año en el que se cumplirán 45 años de la recuperación de los carnavales de la mano de las comparsas y también 40 años de la creación de estos personajes botxeros.
Farolín es un bilbaino o bilbaina que, aunque no haya nacido en el mismo Bilbao, se distingue notablemente en su actividad profesional o pública, alardeando, además, de su condición botxera, y cuyo principal lema podría ser “Semper Plus Ultra” / “Siempre Más Allá”.
Lutxo Egia Del Río, Farolín, bilbotarra nacido en Santander en 1969, sociologo por estudios, escritor y performer por oficio. Principalmente se dedica a coordinar la actividad cultural del espacio sietecallero BIRA, pero también ha escrito y publicado novelas, cuentos y obras de teatro. Actualmente, tiene dos obras en el circuito teatral: “Identitarteak” (de la mano de Galder Pérez y Ane Zabala) y “Hamalau” (con Mikel Martinez). Gusta de disfrazarse y, en alguna ocasión, el espejo le ha devuelto la imagen travestida de Oxtul Aige, sin que supieramos cual era su verdadera identidad.
Zarambolas es una persona de Bilbao a la que nada le afecta ni le cambia la vida. Adalid del buen vivir, su modo de vida se sintetiza en el “Carpe Diem”/ “Vive el Momento”.
Jasone Akizu Perez, Zarambolas, nació en Ondarroa en 1967. Txistulari de profesión, trabaja como profesora de txistu en BilbaoMusika Eskola. Los últimos años forma parte del equipo de trabajo de la asociación de txistularis del País Vasco, habiendo sido delegada de Bizkaia durante los primeros años y actualmente como secretaria de la asociación. Según se define, es alguien que intenta «estar siempre de buen humor y disfrutar de cada momento».
El juicio a Farolín y Zarambolas es el acto central de una iniciativa festiva que surgió en el año 1984 para instituir en los carnavales de Bilbao uno de los elementos más representativos de las Carnestolendas tradicionales y rurales, donde cada año se condenaba a “las y los malos”. En el caso de la Villa, se optó por dar al tema un tratamiento txirene, evitando la ecuación bueno-malo y optando por un galardón en tono humorístico con el propósito de poner en solfa la dualidad de la personalidad arquetípica de las y los bilbainos.
Continuando la tradición, este año el juicio tendrá lugar el viernes, 9 de febrero, a las 19:30 horas, en la carpa ubicada en la Plaza Nueva. Tras el juicio, a partir de las 20:30 horas en la Plaza Nueva, se llevará a cabo el escarnio público de ambos personajes, espectáculo que irá acompañado de las tradicionales coplillas de carnaval.