Tres de cada cuatro beneficiarios del servicio de teleasistencia vasco betiON, el 76,31%, son mujeres, mientras que casi la mitad de las vascas mayores de 85 años, el 45%, cuenta con este sistema de alerta. BetiON cerró 2023 con 68.817 personas usuarias, 5.479 más que en 2022.
Estas cifras han sido dadas a conocer este viernes por la consejera del departamento de Igualdad, Justicia y Políticas Sociales, Nerea Melgosa, en el transcurso de una visita a las instalaciones centrales de betiON en Bilbao.
Melgosa ha ensalzado la labor de betiON, un servicio que, a su juicio, «es un ejemplo de cómo las nuevas tecnologías pueden favorecer los cuidados» ha remarcado.
Mucho más que una alarma
Asimismo ha recalcado que la teleasistencia «es mucho más que una alarma para cuando se produce una caída», ya que es, además, «una de las herramientas más poderosas para propiciar y facilitar, desde una acción cada vez más predictiva y avanzada, el deseo de la mayoría de las personas mayores de seguir viviendo en sus casas».
La consejera ha detallado el balance del servicio durante el pasado año, que betiON cerró con 68.817 usuarios. De ellos, el 53,52% están en Bizkaia; el 33,96% en Gipuzkoa y el restante 12,52%, en Álava.
Además, 219 personas usuarias de la también conocida como medalla roja, están incluidas, voluntariamente, dentro del protocolo de prevención de casos de malos tratos y otras 364 están monitorizadas, también de forma voluntaria, dentro del de prevención de suicidios.
Asimismo, otras 93 personas participan en el Programa de Teleasistencia de Apoyo a Personas Cuidadoras (PTAC), que trata de apoyar y ayudar a las personas cuidadoras en la certeza de que este apoyo revertirá en una mejor situación para las personas cuidadas.
Melgosa ha recordado que la teleasistencia pública vasca contaba en julio de 2011 con algo menos de 25.000 usuarios, momento de su centralización competencial en el Gobierno Vasco, y ha confiado en alcanzar los 70.000 beneficiarios, «si no es este mismo mes de enero, el próximo» ha adelantado.
