La SD Amorebieta está muy viva. Frente al Sporting volvió a demostrar que es posible con serias opciones de revertir una situación que hace poco más de un mes era crítica. Los azules abandonan el farolillo rojo 10 jornadas después y se siguen acercando a una salvación que cada día está más cerca. A tres puntos, tras una trabajada victoria sobre el Sporting. Jauregi abrió la lata, Morcillo respondió al gol de Otero antes del descanso y sentenció Edwards en el descuento. Un total de 1.718 aficionados con una nutrida representación de hinchada sportinguista vibraron con un emocionante partido.
En su apuesta inicial, Jandro dio continuidad al equipo que asaltó Andorra el pasado lunes a excepción de dos novedades. En la medular, Erik Morán volvió al once inicial tras cumplir ciclo de amonestaciones, mientras que en la delantera Jauregi regresó a la titularidad casi dos meses después en detrimento de Unzueta. El de Muxika no entraba en el once desde el 4 de febrero y terminó siendo protagonista.
Jauregi volvió a marcar
En el primer tiempo, la posesión era del Sporting, pero el mayor peligro llegaba en los trepidantes ataques del Amorebieta. Con un excelso Jauregi recibiendo de espaldas, descargando de cara y atacando los espacios, los azules inquietaban la portería de Yáñez. Pero el gol no llegaría en una de las muchas transiciones, sino a balón parado. Un saque de esquina botado por Morcillo desde la izquierda lo peleó Etxeita en una jugada embarullada que terminó dejando el balón muerto en área pequeña. Jauregi fue el más listo de la clase, muy vivo para mandar el balón al fondo de las mallas y volver a ver puerta dos meses y medio después. Cuarta diana del de Muxika para situarse como máximo artillero del cuadro zornotzarra este curso.
Genialidad de Morci
El equipo de Jandro, bien plantado en defensa, no concedía ningún resquicio por el que aproximarse a la meta local. Sin embargo, a tres minutos del descanso, Nacho Martín encontró una línea de pase para filtrar el balón hacia el desmarque de Otero. El colombiano no falló en el mano a mano definiendo por el primer palo ante la salida de Jonmi. Pero el Amorebieta ya está curado de espanto. Lejos de debilitar a los azules, el gol rojiblanco avivó el ataque local. En el 45′, una acción por banda derecha terminó llegándole a Morcillo en el balcón del área. Cuando parecía que se había perdido toda posibilidad de remate, Morci sacó desde el suelo un disparo tan poco ortodoxo como efectivo que sorprendió a todo Lezama y dejó a Yáñez haciendo la estatua. Genialidad del atacante para asestar un golpe de respuesta al tanto encajado.
Jonmi salvó y Edwards puso la guinda
El Sporting dio un paso al frente y generó serios quebraderos de cabeza a los locales. La figura de Jonmi también emergió para salvar un gol cantado. En el minuto 78, un córner que llegó las botas de Róber Pier a un metro de la línea de gol propició la heroica intervención del meta zornotzarra deteniendo con reflejos de gato el remate del defensa rojiblanco. Con el cuadro gijonés volcado en busca del empate, el Amorebieta sentenció el envite con un auténtico golazo de Ryan Edwards. Sensacional combinación por la izquierda con un magistral pase filtrado por Lasure para el desmarque del australiano. Con sangre fría y poco ángulo, engañó a Yáñez amagando el centro para fusilar por su palo mediante un potente zurdazo.
Celebración por todo lo alto
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— SD Amorebieta (@SDAmorebieta) March 24, 2024