La intersindical formada por LAB, Steilas, ESK, EHNE, Etxalde e Hiru, que se ha concentrado este jueves ante la Diputación foral de Bizkaia por la muerte en accidente de trabajo en Artzentales de un empleado de 22 años, ha considerado «preocupante» la mortalidad de trabajadores menores de 30 años, «recién incorporados al mundo laboral», y ha denunciado que la tasa de mortalidad en el sector forestal «vence todas las marcas».
Según han informado las centrales sindicales, el trabajador de 22 años, que resultó herido grave en labores forestales la pasada semana en la localidad vizcaína de Artzentales, ha fallecido esta semana a consecuencia de las graves lesiones sufridas.
Por ello, este jueves la intersindical se ha movilizado delante del Palacio foral de Bizkaia para denunciar lo ocurrido y exigir «medidas preventivas eficaces», a fin de garantizar la salud laboral, según ha informado LAB.
Los sindicatos han mostrado su solidaridad con los familiares, compañeros, amigos y allegados del fallecido y han denunciado que trabajos forestales, caídas de altura en obras, transportistas muertos por problemas cardiovasculares, atrapamientos de máquinas, accidentes en in itinere, etc., «vuelven a estar al orden del día».
Han denunciado que los patrones de accidentes laborales «se repiten», sin que ni la patronal ni el Gobierno Vasco «actúen debidamente ante esta sangría» en la medida en que «siguen sin tomar ninguna medida, obviando toda responsabilidad».
Los sindicatos han asegurado que tasa de mortalidad del sector forestal «vence todas las marcas» y han indicado que en el caso de Bizkaia y Gipuzkoa, la viabilidad de las empresas forestales es «limitada a pesar de contar con normas forales ‘ad hoc’ para ellas».
RELACIONES LABORALES «PRECARIZADAS»
Para los sindicatos, detrás de los accidentes forestales se esconde una explotación intensiva de la madera que se basa en «relaciones laborales precarizadas» para obtener beneficios, ahorrando para ello en medios de seguridad laboral.
Según han denunciado, este sector es conocido por la ausencia de recursos preventivos, la falta de formación, herramientas de trabajo inadecuadas, jornadas largas con ritmos de trabajo muy altos, esfuerzos físicos, zonas con altas pendientes en plantaciones forestales, y un largo etcétera.
Las centrales sindicales consideran que «no es casualidad» que el convenio de la madera de Bizkaia lleve desde el 2003 sin renovar y han asegurado que un sector en el cual la tasa de mortalidad es «tan alta», es «imprescindible que se tomen medidas para acabar con la «brutal precariedad que sufren» y se recojan medidas preventivas actualizadas que garanticen la salud de las personas que trabajan en este sector.
Los sindicatos han asegurado que no es la primera vez que solicitan a Osalan y al Gobierno Vasco «medidas especiales» para el sector forestal. «Esta vez volvemos a hacerlo pero vemos que la respuesta es estéril», han asegurado.
En alusión a «los riesgos que esconde la propia actividad», han considerado que no se puede olvidar que el trabajador fallecido llevaba solo dos meses trabajando para la empresa Forestal Bejarano e Hijo, SL. y han asegurado que es «preocupante» la mortalidad de trabajadores menores de 30 años, «recién incorporados al mundo laboral».
En este sentido, las centrales sindicales han asegurado que no poder «aceptar esta sangría». «No podemos aceptar ni una muerte mas en el trabajo. No podemos aceptar no regresar a nuestras casas después de una jornada laboral», han reiterado.
