Un 96,5% de los vascos que votaron en los pasados comicios autonómicos volvería a elegir al mismo partido, y solo un 1,8% cambiaría su papeleta. Los votantes de Elkarrekin Podemos, que no obtuvo representación, serían los más proclives a variar el voto, un 21% de quienes se decantaron por su papeleta.
En las elecciones autonómicas vascas del pasado 21 de abril, el PNV y EH Bildu lograron 27 representantes cada uno, aunque los jeltzales obtuvieron un 35,2% de los votos, por un 32,4% de la coalición abertzale.
La tercera fuerza en la Comunidad Autónoma Vasca siguió siendo el PSE-EE, que ganó dos escaños y alcanzó los 12. También ganó escaños en PP, (uno más) y llegó a los siete, tras recabar el 9,2% de los sufragios.
Sumar irrumpió por primera vez en la Cámara autonómica con un representante, y Vox mantuvo la parlamentaria que tenía. Elkarrekin Podemos desapareció del Parlamento vasco, donde tenía seis parlamentario y el resto de fuerzas no obtuvo representación.
Según un sondeo postelectoral del CIS, realizado en la Comunidad Autónoma Vasca, con entrevistas a 4.013 ciudadanos de 18 años o más, entre el 17 y el 22 de mayo, un 96,5% de los encuestados habría votado al mismo partido que el pasado 21 de abril, y solo un 1,8% se habría decantado por otra formación.
En función de los datos del CIS, entre las personas que votaron en las elecciones vascas del 21 abril, el mayor porcentaje de votantes que, una vez conocidos los resultados, habrían votado a otro partido se da en el caso de la coalición Elkarrekin Podemos y Alianza Verde, con un 21,4%. Un 77,2% asegura que mantendría su voto y el 1,3% duda.
En el resto de los partidos y coaliciones, el porcentaje de los votantes que dice que, tras conocer el resultado de los comicios, habría votado lo mismo, supera el 90% en todos los casos. Así, el 100% de los votantes de Vox aseguran que seguirían optando por apoyar a este partido.
En el caso de EH Bildu, un 98,8% de encuestados mantendría el apoyo a la coalición, un 0,4% lo habría cambiado y un 0,6% duda. Le siguen PP, con un 96,6% de personas que habría votado al mismo partido (un 2,4% lo cambiaría y un 0,7% duda), PNV, con un 96,2% de votantes que mantendría su apoyo (un 1,1% habría votado a otro partido y un 2,4% duda), y el PSE-EE, también con un 96,2% de personas que votaría lo mismo (un 1,1% apoyaría a otro partido y un 2,7% duda). En el caso de Sumar, un 96,6% dice que habría mantenido su voto (un 4,3% lo cambiaría y un 1,1% duda).
La mayoría, decidido
Además, el 67,6% de quienes ejercieron su derecho a voto en Euskadi el pasado 21 de abril, lo tenía decidido antes de iniciarse la campaña electoral, un 13,6% días antes de las elecciones, mientras un 8,8% lo decidió al comienzo de la campaña electoral, un 2,8 tomó la determinación en la jornada de reflexión y el 7,1% el mismo día de los comicios.
La mayoría, un 41,8%, votó al partido que mejor representa sus ideas, un 13,6% al más capacitado para gobernar en Euskadi, un 10,7% porque necesitaba un cambio y un 8,5% para evitar que ganase otra opción política. Solo un 5,2% lo hizo animado por el programa electoral de la formación a la que votó.
Abstención
Entre los abstencionistas, el 94,2% habría seguido absteniéndose y habrían ido a votar el 3,4%. La causa más esgrimida para no acudir a las urnas en las pasadas elecciones es la de que «no quisieron ir a votar», apoyada por un 42,3%. Además, la mayoría (un 38,9%) lo tenía decidido hace tiempo.
El motivo principal que más apoyan es el de no sentirse representados por ningún partido (un 35,3%) seguido del hartazgo de la política y las elecciones (21,5%).
Por otro lado, el CIS también cuestiona sobre los sentimientos de pertenencia de los ciudadanos, un ámbito en el que la opción mayoritaria es la de aquellos que se sienten «tan español como vasco», un 41,7% del total.
Un 22,7% asegura sentirse «más vasco que español» y un 19,4% «únicamente vasco», mientras que solo un 4,8% se siente «únicamente español» y un 3,5% «más español que vasco». El resto dice no identificarse con ninguna de estas opciones o prefiere no contestar.
