La tasa de paro de la población de 16 y más años residente en todas las comarcas de Euskadi descendió a 1 de enero de 2023 y seis de cada diez personas ocupadas cuentan con formación superior profesional o universitaria, según datos elaborados por el Instituto Vasco de Estadística, Eustat.
De este modo, en 2023, a 1 de enero, bajó la tasa de paro en todas las comarcas de la Comunidad Autónoma Vasca y destacan por su baja tasa de paro las comarcas de Montaña Alavesa (5,8%), Urola Kosta (5,9%) y Estribaciones del Gorbea (6,2%).
Por el lado contrario, muestran las tasas más altas de desempleo las comarcas de Encartaciones (10,4%), Gran Bilbao (9,9%) y Rioja Alavesa (9,6%).
La tasa de paro es la proporción de las personas que se encuentran en paro sobre el total de la población activa, suma de la población parada y la población ocupada, ha recordado el organismo estadístico
TAMAÑO DE LOS MUNICIPIOS
En relación al tamaño de los municipios, los datos del Eustat indican que la tasa de desempleo es más baja en los estratos de municipios con menos población.
En este sentido, destaca el grupo de municipios con menos de 5.000 habitantes, con una tasa de desempleo del 7,1%. Le siguen el estrato de municipios de 5.000 a 10.000 habitantes y el de 10.000 a 40.000, con un 7,7%, en ambos casos, que supone 8 décimas de punto porcentual menos que la media de Euskadi, que llega al 8,5%.
Con una tasa del 9,7% se encuentra el estrato de 40.000 a 100.000 habitantes, por encima de la tasa de paro promedio de la comunidad autónoma.
En cuanto a las capitales, San Sebastián presenta la tasa más baja de desempleo (6,9%), mientras que Vitoria-Gasteiz y Bilbao tienen tasas de desempleo superior al promedio de la Comunidad Autónoma Vasca, con 9,1% y 10,8%, respectivamente. La tasa de paro ha descendido en los tres casos, 1,7 puntos en Bilbao, 1 punto en Vitoria-Gasteiz y 0,8 puntos en San Sebastián.
Un total de 197 municipios ofrece una tasa de paro inferior a la media (8,5%), lo cual supone un 78% de los municipios. En los extremos, 10 municipios muestran una tasa de paro inferior al 3%. Se trata, ordenados de menor a mayor, de Leintz-Gatzaga, Kripan, Albiztur, Aduna, Gizaburuaga, Arama, Mutiloa, Baliarrain, Murueta y Garai, todos ellos pertenecientes al estrato de menor población de los mencionados, hasta 5.000 residentes.
En el otro extremo, se encuentran siete municipios cuya tasa de paro es superior al 12%, ordenados de mayor a menor tasa. Es el caso de Lanestosa, Ikaztegieta, Alonsotegi, Balmaseda, Oyón-Oion, Sestao y Artzentales, que pertenecen a diferentes estratos de tamaño de municipio.
La tasa de ocupación de la población de 16 y más años residente en Euskadi, la proporción de población ocupada sobre la población de 16 y más años, se situó en un 52,2% a 1 de enero de 2023, lo que representa un incremento de 0,9 puntos porcentuales con respecto a 2022.A nivel comarcal, 17 de las 20 comarcas aumentaron la tasa de ocupación en comparación con el ejercicio anterior.
La comarca de Plentzia-Mungia lidera la clasificación con la tasa de ocupación más alta y alcanza un 56,9%, lo que representa un aumento de un punto porcentual con respecto a 2022. Le sigue Estribaciones del Gorbea, con una tasa del 56,7% y un descenso de 0,7 décimas de punto porcentual en comparación con el año anterior. En tercera posición se encuentra Urola Kosta, con un 56,4%, mostrando un aumento de 0,6 décimas de punto porcentual.
Por municipios y atendiendo a su tamaño, los de menos de 5.000 habitantes presentan una tasa de ocupación promedio relativamente alta (54,8%).
Dentro de este grupo, encontramos municipios con tasas significativamente elevadas como Baliarrain (72,6%), Orendain (68,5%) y Aduna (67,3%), así como municipios con las tasas más bajas como Lanestosa (39,0%), Lagrán (42,6%) y Elantxobe con un 42,7%.
En el siguiente estrato de municipios, entre 5.000 y 10.000 habitantes, la tasa de ocupación promedio es del 54,1%. Destacan en el extremo superior Astigarraga con un 69,2% y Urduliz con un 61,4%.
En el extremo inferior se encuentran municipios como Balmaseda (47,6%), Ondarroa (48,0%) y Lekeitio (48,5%) En el estrato de los municipios con una población entre 10.000 y 40.000 habitantes presentan una tasa de ocupación promedio del 53,3% y Etxebarri sobresale con un 62,5%, seguido de Sopela con un 59,3%.
En el siguiente estrato, municipios con más de 40.000 habitantes y menos de 100.000, Barakaldo tiene la tasa de ocupación más alta, 51,5%, seguido de Irún, con 51,3%. La media de este estrato es del 49,7%.
Por último, en cuanto a las capitales, Vitoria-Gasteiz tiene la tasa de ocupación más alta, situándose en un 52,9%. Le sigue San Sebastián a 0,7 puntos porcentuales de distancia, con una tasa del 52,2%, y Bilbao con una tasa de ocupación del 49,8%.
TRABAJAR DONDE SE RESIDE
Un 39% de las personas ocupadas en Euskadi trabajan en su municipio de residencia, una proporción que aumenta en Álava a 7 de cada 10 personas ocupadas (70,3%) y desciende en Gipuzkoa, donde trabajan en su municipio de residencia casi 4 de cada 10 personas residentes ocupadas (37,3%), y en Bizkaia, con 3 de cada 10 (31%).
Por otro lado, un 51,3% de las personas ocupadas trabaja en otro municipio dentro de su propio territorio histórico. Estas proporciones son del 60% en Bizkaia y del 53,9% en Gipuzkoa. En Álava solo lo hace un 16,2% de su población residente ocupada.
El nivel de formación alcanzado añade información al análisis de la ocupación y del paro y seis de cada diez personas ocupadas cuentan con formación superior.
De este modo, actualmente, el 59,9% de la población ocupada cuenta con una formación de nivel superior, que incluye formación profesional superior (20,3%) y educación universitaria (39,6%).
En la población parada, este nivel educativo representa el 36,8%, en el que la formación profesional superior constituye el 15,5% y la educación universitaria el 21,3% restante.
Frente a ello, el 39,8% de las personas desempleadas tiene solo estudios primarios o no tiene ninguna titulación, mientras que este porcentaje es mucho menor (19,6%) entre la población ocupada.
Por sexo, en términos de ocupación y paro, entre las mujeres ocupadas, el 64,3% ha alcanzado la educación superior, porcentaje que disminuye en el caso de los hombres (55,7%).
Entre las personas desempleadas, el 38,4% de las mujeres tiene educación superior, proporción que desciende entre los hombres en la misma situación (34,6%).
