Óscar de Marcos ha alcanzado un nuevo hito en su carrera con el Athletic Club al disputar su partido número 560, igualando a Iker Muniain en la clasificación histórica de encuentros jugados con el equipo rojiblanco. Sin embargo, más allá de este logro, el lateral ha dejado abierta la incógnita sobre su continuidad en el club más allá de esta temporada.
Un futuro en el aire
A pesar de su peso en el equipo, De Marcos ha reconocido que cada año siente más cerca el momento de la retirada y que es una cuestión que viene reflexionando desde hace varias temporadas. “La decisión habrá que tomarla cuando tenga todo encima de la mesa y considere que voy para un lado o para otro”, ha señalado.
El desgaste de la exigencia
El futbolista ha admitido que el esfuerzo diario le pasa factura y que la intensidad de los entrenamientos y los partidos en un equipo como el Athletic le llevan a plantearse su continuidad. “Cada día cuesta más ir a entrenar al ritmo que juega este equipo”, ha explicado, dejando entrever que el aspecto físico será determinante en su decisión final.
¿Seguir si el equipo entra en Champions?
De Marcos ha sido cauto, pero ha reconocido que clasificarse para la Champions League podría pesar en la balanza a la hora de decidir su futuro. “Está dentro de la balanza, todo está dentro de la balanza”, ha afirmado, sin cerrar ninguna puerta.
Por ahora, el jugador se centra en lo inmediato. “Quedan tres meses súper ilusionantes y nos tenemos que centrar en ello”, ha asegurado, dejando claro que su prioridad es acabar la temporada de la mejor manera posible antes de tomar cualquier decisión sobre su futuro.
