Ernesto Valverde se mostró satisfecho y sereno tras la victoria por 2-0 del Athletic ante el Glasgow Rangers en San Mamés, que supuso la clasificación del conjunto rojiblanco para las semifinales de la Europa League. Un hito que solo se ha alcanzado tres veces en la historia del club en competiciones europeas.
«Queríamos que se notara que jugábamos en casa, meterle ritmo al partido y conectar con nuestra gente», destacó Valverde, subrayando el esfuerzo colectivo y la determinación de sus jugadores. “Lo mejor ha sido la determinación con la que hemos salido al campo”, afirmó, valorando una actuación que reflejó el carácter competitivo del equipo durante toda la temporada. “Es muy difícil ganar partidos, pero este equipo compite bien siempre, incluso cuando no salen las cosas”.
De Marcos
Especialmente emocionado se mostró el técnico al referirse a Óscar de Marcos, uno de los pilares del vestuario que se retirará a final de temporada. «De Marcos en eso es un seguro. Su retorno, su punto de honor, es un impulso para nosotros», subrayó. Valverde puso en valor ese tipo de esfuerzo silencioso que, en sus palabras, “solo lo aprecian los entrenadores, pero aquí en San Mamés es muy apreciado”. Su actuación fue clave para frenar al peligroso Czerny, uno de los jugadores más desequilibrantes del Rangers.
Mirando ya a semifinales, Valverde reconoció la dificultad del próximo reto ante el Manchester United, que será rival del Athletic por un puesto en la final: “Tendremos el segundo partido fuera y eso nos cambia la visión respecto a las eliminatorias anteriores”. El técnico no ocultó su respeto por los ingleses: “Es un equipo de Champions, aunque en su liga no estén tan bien. Tendremos que hacer dos partidos fuertes, como hasta ahora”.
San Mamés volvió a vivir una noche mágica y Valverde no quiso olvidar a la afición: “Hoy era un día muy especial. Hemos conectado con nuestra gente y sabíamos que, con ellos, somos un equipo potente”.
