La naturaleza, serena y ajena al ruido humano

La montaña sigue siendo refugio y abrigo de miles de vizcaínos
La naturaleza, serena y ajena al ruido humano
Caballos tranquilos ante el Arimegorta y el Zenigorta / Javier
Banner de Laboral Kutxa en Bilbao

En la imagen se aprecia un amplio prado de montaña ante los picos Arimegorta y Zenigorta. El campo está cubierto de hierba verde y salpicado de pequeños arbustos y rocas dispersas. En él, pastan tranquilamente varios caballos de color castaño y marrón, repartidos por todo el terreno; algunos están de pie comiendo hierba, mientras otros descansan tumbados. Hacia el centro-derecha hay además un grupo de vacas, también reposando y pastando. Al fondo, se extiende una sucesión de lomas y montañas de tonos azulados y grises, que se difuminan en la distancia bajo un cielo cubierto de nubes bajas y densas, presagiando lluvia. El ambiente transmite paz y amplitud, típico de una jornada en una sierra o zona alta de nuestra querida Bizkaia.

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