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A lo lejos, en el centro de la imagen, se alza el Monte Serantes, una de las montañas más características de la zona, formando un imponente telón de fondo que domina la vista. Esta montaña, que forma parte de la línea de montes que rodean la ría de Bilbao, aporta un toque de majestuosidad al paisaje. La presencia del monte añade una sensación de conexión entre el entorno natural y el crecimiento urbano de la ciudad.
En el fondo, se ve claramente la zona industrial y urbana, con el río que serpentea entre las ciudades, mientras que las nubes dispersas en el cielo completan la escena, reflejando un día claro y soleado. Este lugar, desde donde se captura la imagen, ofrece una de las mejores perspectivas de cómo Bilbao se ha expandido a lo largo del tiempo, adaptándose y coexistiendo con su entorno natural de manera armoniosa.
 
			 			 	
		  	 
			 			 	
		  	 
	
