Un gesto por la libertad y la convivencia
Las Juntas Generales de Bizkaia han plantado este domingo un retoño del Árbol de Gernika en Villabuena de Araba, en colaboración con su Ayuntamiento. El ejemplar, de ocho años de edad, ha sido colocado en la plaza que lleva el nombre del icónico árbol, en un acto cargado de simbolismo.
La ceremonia ha contado con la participación de la presidenta de las Juntas Generales, Ana Otadui, y el alcalde de Villabuena, Iñaki Pérez Berrueco, junto a representantes institucionales y numerosos vecinos y vecinas del municipio.
Compromiso con los valores vascos
Durante su intervención, Otadui ha subrayado que cada retoño plantado representa “una promesa renovada” de preservar valores como la libertad, la paz, la convivencia y la defensa de los derechos. Además, ha agradecido al consistorio alavés su implicación y sensibilidad.
El alcalde ha resaltado el significado del acto, que ha coincidido con las fiestas locales de San Andrés, y ha expresado su orgullo por custodiar un símbolo de tanta carga histórica y cultural.
Una tradición con proyección internacional
Tras las intervenciones, las autoridades han echado las primeras paladas de tierra, iniciando el proceso de plantación simbólica del árbol. Los asistentes también han participado en este gesto, tradicional en las ceremonias de entrega de retoños del roble de Gernika.
El acto ha concluido con una foto de familia y la entrega del Certificado de Autenticidad del árbol. Según han recordado desde la institución foral, ya se han plantado más de 450 retoños en lugares significativos de los cinco continentes.
Uno de los más antiguos aún vivos se encuentra en el jardín del edificio Nabor, junto a la Casa de Juntas de Gernika, y data de 1859. En el ámbito internacional, destaca el roble plantado en Rosario de Santa Fe (Argentina) en 1886.
