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Álava, un plan perfecto para esta Semana Santa

Vive experiencias únicas y respira naturaleza e historia
Es el Menhir de Arlobi en Álava / Radio Popular-Herri Irratia

Las vacaciones de Semana Santa nos invitan a  buscar la  escapada  ideal para descansar y  cargarnos de energía  hasta que lleguen las de verano. Por ello siempre es interesante tener a mano propuestas atractivas con  las que sentirnos identificados e identificadas. Y si son propuestas cercanas, mucho mejor.

Cristina González, diputada foral de turismo de Álava se acercó este pasado fin de semana a nuestro viajero programa «El Kiosko» con planes diferentes para conocer y disfrutar  el  territorio alavés que os van a sorprender. Planes para respirar naturaleza e historia a partes iguales.

Conocer Álava en bicicleta

La bicicleta es una de las mejoras maneras de conocer y disfrutar de un lugar por la sensación de bienestar y contacto con el entorno que genera. Álava es un paraíso para las personas aficionadas a dar pedales gracias a sus más de mil kilómetros de itinerarios verdes, varios centros BTT y carreteras secundarias con poco tráfico y bien cuidadas.

Hoy ponemos encima de la mesa dos propuestas para todos los públicos.

                                     Gaubea Flow Line

La pista de descenso en BTT ‘Gaubea Flow Line’ es la primera. Se trata de un recorrido acondicionado y balizado en la localidad de Angosto (Valdegovía), único en Euskadi por sus características, que ofrece más de 700 metros repletos de diversión y retos: curvas peraltadas, saltos, mesetas y zonas onduladas que permiten propulsarse sin necesidad de dar pedales.

Se trata de una pista de descenso dirigida a todas las personas familiarizadas mínimamente la bicicleta de montaña de manera que la mayor o menor dificultad depende de la velocidad de bajada que imprime la y el ciclista: a velocidades lentas es para todos los públicos, mientras que a grandes velocidades exige más nivel técnico y destreza.

Muy cerca se pueden disfrutar de recursos históricos, culturales y naturales de primer nivel como la Torre de los Varona, el Valle Salado de Añana y el Parque Natural de Valderejo.

 Romanic Bike Route

La segunda propuesta es la ‘Romanic Bike Route’, un recorrido de 70 kilómetros en bicicleta por la comarca de la Llanada Alavesa que une naturaleza, gastronomía, arte e historia.

Arte e historia porque esta ruta cicloturista permite conocer y disfrutar de las dos joyas del románico alavés, la Basílica de Armentia y Nuestra Señora de Estíbaliz; así como de las enigmáticas iglesias pintadas de Alaitza y Gazeo.

También otros interesantes templos románicos como San Andrés, en Erentxun; San Román, en Ezkerekotxa; Nuestra Señora de Ayala en Alegría-Dulantzi; San Juan de Arrarain, en Elburgo; y otros ejemplos en Oreitia y Arbulu.

Pero también naturaleza… porque el románico es un estilo muy unido a la naturaleza y la vida rural, y muchas de estas iglesias y ermitas románicas se localizan en bosques, colinas, riscos o pequeñas poblaciones bien conservadas.

Estas características hacen que descubrir el románico alavés en bicicleta suponga al mismo tiempo una oportunidad inmejorable para conocer y disfrutar de Álava, de sus paisajes, de su gastronomía y de su vida cultural.

Planear  conocer de cerca «la cultura pastoril»

La comarca de Gorbeialdea constituye una de las principales zonas de pastoreo de montaña de Álava y ofrece a las personas visitantes experiencias muy interesantes como la posibilidad de ser ‘pastor o pastora por un día’.

Por ejemplo, en la localidad de Olaeta, la quesería Atxeta o la quesería Iruri nos brindan una experiencia ideal para vivir en familia: cómo se elabora el queso, cómo se ordeña una oveja. Sin olvidar disfrutar de la naturaleza y la gastronomía de la zona.

Planear descubrir una joya medieval

Finalizamos este ‘viaje’ por Álava con una propuesta de lujo: conocer la villa medieval de Artziniega, un pueblo de artistas como atestigua la existencia de una rica oferta museística impropia de una localidad de menos de 2.000 habitantes.

El Museo Etnográfico permite conocer cómo era la vida de nuestros antepasados tanto en casa como en la escuela o en la tienda del pueblo, los oficios artesanos, etc. Sus salas permiten viajar en el tiempo, gustan a los mayores y sorprenden a los y las txikis.

Muy cerca, en el Museo Santxotena se pueden admirar las obras Xabier Santxotena, discípulo de Oteiza, con el ‘plus’ de conocer personalmente al artista y escuchar de su boca las claves de la inspiración o de las técnicas de la escultura.

Sin salir de Artziniega, Nuestra Señora de La Encina (S. XV) merece sin duda una visita para admirar su estilo entre gótico y renacentista, el retablo de su altar mayor y su Museo de Arte Sacro

Otro enclave cercano a Artziniega y también de interés turístico es Arcos de Quejana con La Robleda de los Sueños, un bosque pintado único que unifica la obra de 25 artistas que han plasmado sus obras sobre la corteza de los árboles. Este espacio expositivo está junto al hotel y restaurante Arcos de Quejana.

Para terminar el plan… hay que conocer el espectacular Salto del Nervión y el cañón de Delika, y disfrutar de su gastronomía y el txakoli de Ayala.

Para más información visita la web: www.alavaturismo.eus