


¿Cómo evangelizar en Instagram? Néstor Artola, Miembro de EKO-ACG, responde en el espacio «Evangelio 3.0»
Contenido en Instagram
A lo largo de estos años, en este espacio de Evangelio 3.0, hemos ido viendo que las redes sociales han venido para quedarse y que es importante que haya referentes cristianos en ellas.
Muchos de nuestros jóvenes están en las redes y como cristianos no podemos quedarnos indiferentes ante esta realidad. Hoy día las redes sociales han tomado un lugar central en la vida de millones de personas.
Jesús, en el evangelio de Marcos 16, 15 dice: “Id por todo el mundo y predicad el Evangelio a toda criatura”. Ese “todo el mundo” hoy también incluye el mundo digital.
Una de esas redes sociales es Instagram.
Instagram no es solo una aplicación para fotos, filtros y entretenimiento. Es una plaza pública moderna, donde se forman ideas, se construyen identidades y se buscan respuestas. Allí, como cristianos, podemos y debemos estar presentes, no con arrogancia, sino tendiendo puentes en clave de escucha, acogida y verdad.
Pero, ¿Cómo se evangeliza en Instagram? ¿Qué significa llevar el Evangelio a esa plataforma?
Si estamos convencidos de que merece la pena acercarnos al mundo de Instagram y hacernos presentes en clave evangelizadora, para evangelizar en Instagram sin convertirla en un púlpito que sermonea o en una cuenta sin alma, propongo que miremos esta acción de evangelizar como una llamada a ser auténticos testigos de Cristo en medio del lenguaje y la cultura digital actual.
Para desarrollar nuestro testimonio en Instagram, podemos fijarnos en nueve puntos importantes:
Primero, definir nuestro propósito, el para qué quiero estar.
Antes de empezar a publicar cualquier cosa en Insta, pregúntate: ¿para qué quiero usar Instagram? ¿Quiero usarla como herramienta de evangelización? ¿Quiero compartir versículos, contar mi testimonio, responder dudas, o simplemente inspirar a otros a acercarse a Dios? No necesitas hacer todo. Solo sé fiel al mensaje que Dios ha puesto en tu corazón. Una cuenta sencilla pero auténtica puede ser más poderosa que una cuenta grande y vacía. Es importante decidir mi propósito, que además le dará singularidad a mi cuenta.
Segundo, conocer a la audiencia a la que te diriges.
Instagram es usado por jóvenes de todo el mundo. Es una red rápida, visual y emocional. La gente no busca discursos largos ni teologías complicadas. Busca mensajes claros, cercanos, que hablen de corazón a corazón. Aprende a comunicar con sencillez, sin perder profundidad. Recuerda: Jesús usó parábolas simples para hablar de realidades eternas. Tú también puedes usar una imagen, una frase, un video de 15 segundos para sembrar una semilla de vida.
Tercero, crear contenido con sentido.
Hay muchas formas de evangelizar en Instagram. Puedes usar:
– Imágenes con versículos: una buena foto acompañada de la Palabra puede tocar a alguien en un momento clave.
– Reels o videos cortos: puedes grabar una oración, una reflexión o una frase de impacto que invite a pensar o a volver a Dios.
– Historias: usa preguntas, encuestas o reflexiones breves para generar interacción y abrir espacio para el diálogo.
– Carruseles: ideales para explicar temas como “¿qué es la salvación?”, “cómo orar”, o “qué significa tener fe”.
No necesitas ser diseñador profesional. Usa herramientas simples como Canva o CapCut para que tu contenido sea visualmente atractivo sin dejar de ser profundo.
Cuarto, ser auténtico.
No se trata de parecer perfecto. Nadie se acerca a Cristo porque ve a una persona perfecta. Se acercan cuando ven a alguien real, que lucha, que cae y se levanta, y que a pesar de todo sigue confiando en Dios. Comparte tus procesos, tus dudas, tus oraciones sinceras. Habla desde tu historia. Lo que has vivido con Dios puede ser justo lo que alguien necesita escuchar. La autenticidad se verifica en la coherencia entre lo que dices y lo que haces. Es importante que realmente tu mensaje sea coherente. Así como no se puede hablar de la paz usando la violencia, tampoco se puede evangelizar desde la incoherencia manifiesta.
Quinto, publicar con constancia y propósito.
No hace falta publicar todos los días, pero sí hacerlo con intención. Es importante programarse las publicaciones, haciendo un pequeño plan. Un ejemplo puede ser:
– Lunes: versículo y reflexión.
– Miércoles: reel con una oración.
– Viernes: testimonio breve o pregunta a tus seguidores.
– Domingo: agradecimiento o mensaje de esperanza.
Sexto, hacer oración antes de publicar.
Puede sonar simple, pero es clave. Antes de compartir algo, pide al Espíritu Santo que use esa publicación para tocar a quien lo necesite. Tú siembras, pero Dios hace crecer. Nunca sabes quién está al otro lado de la pantalla con el corazón roto, buscando una señal, una palabra, una verdad. Es importante darse cuenta de que para los cristianos la misión es acercar a Jesús a las personas. Ofrecer el encuentro con Jesús es lo más importante, teniendo en cuenta que nadie puede dar lo que no tiene. Por eso la oración es un pilar fundamental de la evangelización en redes.
Séptimo, evangelizar con amor, no con juicio.
No estamos llamados a condenar, sino a anunciar. En redes sociales, es fácil caer en la discusión, en la polémica, en el ataque. Pero el amor de Cristo no se impone, se propone.
Habla con respeto, responde con paciencia, y no temas ser firme sin dejar de ser amable. Como dice la primera carta de Pedro 3,15, debemos estar siempre listos para responder con mansedumbre y respeto a quien nos pregunte por la esperanza que hay en nosotros.
Octavo, crear comunidad.
No busques solo tener seguidores. Busca formar una comunidad donde se ore, se comparta y se camine juntos en la fe. Responde mensajes, agradece los comentarios, ora por quienes te escriben. Que tu cuenta no sea un monólogo, sino un espacio de encuentro con Dios.
Y finalmente, confía en lo que Dios puede hacer.
Tal vez sientas que no tienes suficiente preparación, o que nadie te escuchará. Pero recuerda: Dios no llama a los capacitados, Él capacita a los que llama. Una sola publicación tuya puede ser el instrumento que Dios use para cambiar una vida. No subestimes el poder de una imagen, una frase o una oración hecha con fe.
Evangelizar en Instagram es simplemente dejar que tu fe hable, que tu historia inspire, que tu contenido toque corazones. No necesitas ser viral para ser útil en el Reino. Solo necesitas ser fiel.
Hoy más que nunca, el mundo necesita esperanza, verdad, y amor auténtico. Instagram puede ser una plataforma de distracción, sí… pero también puede ser un altar. Un espacio donde la Palabra se haga visible, donde Cristo sea anunciado y donde muchos encuentren dirección.
¿Qué comentario final harías a nuestra audiencia?
Creo que lo más importante es que si alguien que nos escucha siente esta llamada de estar presente en las redes en clave evangelizadora, que no tenga miedo. Que dé el paso, que use su cuenta para brillar en la oscuridad, para anunciar la buena noticia, y para llevar a Cristo donde más se necesita: justo donde están las miradas del mundo.
El miedo nos puede paralizar, alejar de lo que realmente nos ayuda y nos hace felices. No podemos estar en instagram de manera ingenua, pero podemos seguir estos pasos para estar siendo evangelizadores en Instagram.
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