

Cada vez más, las farmacias se consolidan como espacios fundamentales no solo para la dispensación de medicamentos, sino también como puntos de apoyo y orientación para la población mayor. María José Díaz, directora del Centro de Información del Medicamento del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Vizcaya, ha destacado la importancia de la farmacia en la vida de las personas mayores, especialmente en un contexto donde la sociedad se enfrenta al envejecimiento poblacional.
El Día Internacional de las Personas de Edad: Un Llamado a la Acción
El 1 de octubre, coincidiendo con el Día Internacional de las Personas de Edad, se subraya un lema crucial: “Las personas de edad impulsan la acción local y mundial, nuestras aspiraciones, nuestro bienestar y nuestros derechos”. Este mensaje, que celebra la importancia de los mayores en la sociedad, también refleja el creciente desafío de garantizar su bienestar. María José Díaz ha subrayado que las personas mayores no solo desean ser parte activa de la sociedad, sino también contribuir al progreso, desde su experiencia y conocimientos.
En Bizkaia, como en muchas otras regiones, la proporción de personas mayores de 65 años ha alcanzado un 25%. Este grupo poblacional, en constante crecimiento, demanda un cambio en la manera en que la sociedad los percibe y los apoya. «No se trata solo de cumplir años, sino de hacerlo con una buena salud», ha afirmado Díaz, reconociendo que a medida que las personas envejecen, sus necesidades de salud se vuelven más complejas.
La Farmacia: Un Espacio de Apoyo y Seguridad
La farmacia se ha transformado en un centro de orientación esencial para la salud de los mayores. Además de la dispensación de medicamentos, muchas farmacias ofrecen servicios personalizados, como la preparación de la medicación en pastilleros o la orientación sobre tratamientos específicos. María José Díaz ha destacado cómo el Colegio de Farmacéuticos de Vizcaya trabaja para crear alianzas con otros organismos y entidades, ampliando los servicios y el apoyo disponible para los mayores.
Uno de los grandes logros recientes en este ámbito es la firma de un acuerdo con EUDEL (la Asociación de Municipios Vascos), que permitirá a las farmacias ser un punto de referencia y orientación para las personas vulnerables. Esta colaboración subraya la importancia de la farmacia como un espacio no solo para la salud física, sino también como un refugio de seguridad para quienes más lo necesitan.
La farmacia, como espacio sanitario accesible y cercano, seguirá siendo un pilar esencial en la atención a los mayores. El Colegio de Farmacéuticos de Vizcaya, como entidad representativa, continuará trabajando para fortalecer los lazos entre las farmacias y las comunidades, asegurando que las personas mayores no solo reciban atención médica, sino también el apoyo necesario para vivir de manera activa y saludable.
En un mundo cada vez más envejecido, el rol de las farmacias será crucial para construir una sociedad inclusiva y cuidadosa con todos sus miembros. Como bien ha señalado María José Díaz: «Queremos que las personas mayores sigan siendo protagonistas de su propia vida y de la evolución de la sociedad».