"En torno a un 8% de los alimentos pueden presentar contaminación por dioxinas"

Así afectan los compuestos químicos que generan incineradoras e industrias a nuestra salud

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«En torno a un 8% de los alimentos pueden presentar contaminación por dioxinas»

Incineradora / Freepik
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Las dioxinas, los furanos y otros nanocompuestos químicos forman parte de una nanocontaminación que no vemos, pero que sí respiramos y comemos. Así lo ha explicado el experto en ecología Ion Colino en la sección de ecología «Campo Abierto» de Radio Popular – Herri Irratia, donde ha advertido que estos contaminantes “no se biodegradan” y se van acumulando con el tiempo en el medio ambiente y en la cadena alimentaria.

Estos compuestos se generan principalmente en procesos de combustión: incineradoras, térmicas, cementeras, petroquímicas, industrias papeleras o fabricantes de herbicidas y pesticidas, aunque también pueden producirse en fenómenos naturales como erupciones volcánicas o incendios forestales. El problema, señala Colino, es que son partículas persistentes con gran afinidad por la grasa, lo que hace que se fijen al tejido adiposo de animales y personas, pudiendo provocar cáncer y enfermedades degenerativas que pasan de generación en generación.

Aunque en Europa existe una normativa estricta y sistemas de filtrado que llegan a retener hasta el 97% de estas sustancias en las incineradoras, ese pequeño porcentaje restante “se va acumulando año tras año”, recuerda Colino. De hecho, calcula que en torno a un 8% de los alimentos (carnes, mariscos, etc.) pueden presentar contaminación por dioxinas incluso en un entorno regulado como el europeo.

¿Qué puede hacer la ciudadanía? Para el experto, no se trata de “quedarse de brazos cruzados”, sino de reducir el consumo, apostar por el reciclaje y la reutilización y priorizar alternativas como las plantas de compostaje frente a la incineración de residuos, mucho menos eficiente energéticamente y que contribuye además a las emisiones de CO₂ y al cambio climático. “Aunque el problema sea macro, nosotros sí podemos hacer muchas cosas”, concluye Colino.

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