El Grupo Social ONCE alcanzó en 2022 sus máximos históricos de retorno social para la ciudadanía ya que repartió 25 millones en premios en Euskadi y generó empleo para personas con discapacidad al invertir 230 millones de euros, de los cuales 5 millones se llevaron a cabo en Euskadi. Ander Miranda vendedor en San Sebastián en la calle Urbieta, ha presentado su testimonio como trabajador de la ONCE y su experiencia al quedarse invidente en 2008.
En los últimos años, las empresas del Grupo Social ONCE han impulsado la contratación en riesgo de exclusión, como 119 mujeres víctimas de violencia de género, 28 refugiados ucranianos y otras 293 personas vulnerables. Y mantienen la vocación internacional, por ejemplo, en Colombia, donde trabajan 349 personas en dos plantas de lavandería industrial en Bogotá y Medellín, de las que 193 tienen algún tipo de discapacidad.
Los ingresos que recibió la ONCE permitieron acoger a 3.100 personas que perdieron la vista en 2022, en Euskadi 114 personas y recibieron la atención personalizada con la que cuentan las 70.490 personas ciegas afiliadas. En Euskadi, un total de 3200 personas reciben el apoyo integral de profesionales a través de la formación que reciben sobre mediación específica para personas con sordoceguera, cobertura de estudiantes ciegos o 27 nuevos perros guía.
