Alex Txikon está ya de vuelta en casa, tras casi tres meses en el Everest, aunque finalmente tuvo que renunciar a su plan inicial de ser el primero en hacer cumbre en invierno y sin oxígeno artificial. El lemoarra extrae en Radio Popular-Herri Irratia las lecciones positivas de la experiencia, y sobre todo el hecho de poder decir que ha regresado, tras la avalancha que estuvo cerca de acabar con su vida: «Probablemente haya sido la vez que más cerca he estado de morir, ni yo me creo que esté vivo. Pero no pasé miedo, porque sabía que no iba a haber un mañana».