El ciclista esloveno Tadej Pogacar (UAE Team Emirates) se impuso este jueves en la sexta etapa de la 110ª edición del Tour de Francia, disputada sobre 145 kilómetros entre Tarbes y Cauterets-Cambasque, tras dejar atrás al nuevo líder, el danés Jonas Vingegaard (Jumbo-Visma), en la ascensión final.
La etapa cambió en la ascensión al Tourmalet, a 48 kilómetros de meta, donde primero una ofensiva en bloque del Jumbo rompió la carrera; después atacó el danés para marcharse por delante junto al esloveno y alcanzar a los escapados. Entre ellos, se encontraba Wout van Aert (Jumbo-Visma), que tiró del grupo hasta la subida final, donde Pogacar dio un arreón y se fue solo hasta la victoria.
Tras la ajetreada etapa del miércoles, esta vez la segunda jornada pirenaica arrancaba de nuevo con corredores de mucho nivel buscando la fuga desde el primer kilómetro en Tarbes, hasta formar un grupo con 15 ciclistas del nivel de Wout van Aert (Jumbo-Visma), Julien Alaphilippe (Soudal-Quick Step) o Michal Kwiatkowski (INEOS Grenadiers).
El nutrido grupo ya sacaba más de dos minutos al pelotón principal a los 15 kilómetros de etapa, distancia cómoda para empezar a afrontar las diferentes ascensiones del día. De hecho, en la primera ascensión del día, al Col de Capvern-les-Bains de tercera categoría, se amplió la ventaja a tres minutos, con un ritmo muy potente de Van Aert, y con el estadounidense Neilson Powless (Education First) líder de la montaña, coronando en primera posición.
A noventa de meta arrancó la primera ascensión importante del día, el Col de Aspin, de primera, donde de nuevo Van Aert aceleró para seleccionar la escapada, y otra vez Powless coronó en cabeza. En la bajada hacia el Tourmalet, Van Aert y Van der Poel (Alpecin Fenix) descendieron a toda velocidad para ampliar la renta a casi cinco minutos.
En la larguísima ascensión al mítico Tourmalet, Alaphilippe lo intentó desde lejos, pero un Van Aert que estaba en todo lo neutralizó rápido, mientras que por detrás el Jumbo subió mucho el ritmo para seleccionar mucho el grupo de favoritos y preparar un posible ataque de Vingegaard.
Un acelerón de Wilco Kelderman (Jumbo-Visma) dejó solos a Pogacar, Vingegaard, su compañero Kuss y el hasta ahora líder Jai Hindley (Bora-Hansgrohe), pero Kuss volvió a cambiar el ritmo para dejar solos a los dos últimos ganadores de la carrera, lo que aprovechó el danés para mantener la inercia e irse solo con el esloveno hasta la cima.
Tras sacarle más de dos minutos al resto de favoritos, el dúo inició la bajada, donde contactaron con Van Aert y los restos de la fuga, que marcharon a gran velocidad hasta la ascensión final, manteniendo una ventaja estable en torno a los dos minutos sobre la grupeta del líder.
En el inicio de la subida a Cauterets, Van Aert dio todo lo que le quedaba para dejar solos a los dos ases a falta de cinco kilómetros para meta, lo que obligó a Vingegaard a probarlo, pero a diferencia de en la quinta etapa, Pogacar pudo seguirlo sin complicaciones.
En los últimos dos kilómetros, el esloveno del UAE pegó un ‘hachazo’ que sacó de rueda al actual ganador, conquistando la etapa. Por detrás el español Carlos Rodríguez (INEOS Grenadiers) atacó en el grupo de favoritos y llegó junto a Hindley y Simon Yates (Jayco Alula).
En la meta, Pogacar aventajó en 24 segundos, y los 4 de bonificación, al maillot amarillo, Vingegaard, líder con 25 segundos de renta respecto al esloveno. Tercero es el australiano Jay Hindley, a 1:34. El español Carlos Rodríguez (INEOS Grenadiers), séptimo en la etapa a 2:39, es quinto a 3:30 de Vingegaard.
Este viernes se vivirá la séptima etapa, totalmente llana y en la que los ciclistas recorrerán 170 kilómetros entre Mont de Marsan y Bourdeos, en una nueva oportunidad para los esprínteres de ‘rascar’ triunfo en medio de una semana demasiado montañosa para ellos.
