La economía vasca cerró 2023 en la zona de ‘crecimiento suave’ con un valor de 83,1 en diciembre, cifra que –no obstante– representa 2,9 puntos menos que la de noviembre, según el ‘Termómetro de la economía vasca’ correspondiente al último mes del pasado año.
Este informe, elaborado por el Departamento de Economía y Hacienda del Gobierno Vasco, constata que la economía de Euskadi «se consolida
en un contexto de incertidumbre al seguir por encima de los 50 puntos», según ha señalado el propio Ejecutivo en un comunicado.
El contexto internacional de desaceleración, con un proceso inflacionista cada vez más controlado pero aún persistente, y el endurecimiento de la política monetaria, también ha afectado a la economía vasca.
No obstante, desde el Gobierno se destaca que «el crecimiento de la inversión y el consumo, aunque leve, se sitúa ahora por encima del incremento medio de la actividad».
Mejora el empleo
En el ámbito de la oferta, la construcción y los servicios registran un crecimiento destacado, al contrario que la industria, sector que permanece en situación de contracción. El mercado de trabajo continúa mostrando dinamismo e incluso mejora respecto al mes pasado.
El pasado mes de marzo, la economía vasca entró en la zona de ‘crecimiento suave’ por primera vez desde hace dos años, una consolidación que ha mantenido los últimos diez meses de 2023.
El ‘termómetro’ se elabora mensualmente sobre la base de más de cien indicadores de la economía vasca y se publica durante los primeros días de cada mes.