La Sala de lo Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV) ha confirmado la condena de 14 años de prisión impuesta por la Audiencia de Álava a un hombre, por agredir sexualmente a su hija durante ocho años desde que tenía 6 años de edad.
Así, el TSJPV ha rechazado el recurso interpuesto por el procesado que, entre otras cuestiones, alegó que no hubo prueba de cargo bastante para condenarle partiendo del cuestionamiento del testimonio de la víctima.
El TSJPV recuerda que el tribunal de instancia «contrastó la declaración del encausado con la de la perjudicada, estimando que la versión de esta merecía credibilidad al haber superado la triple prueba (credibilidad subjetiva, objetiva y persistencia en la incriminación) y contar con elementos objetivos de corroboración periférica más consistentes que los que avalaron la declaración del acusado».
El Superior vasco indica que la Audiencia de Álava no apreció la concurrencia de motivos espurios para la denuncia de la víctima y añade que esta «siempre ha mantenido ante la Policía, ante el médico forense y ante el equipo psicotécnico que antes de estos hechos la relación con su padre era buena y que ella quería tener una familia».
«La víctima no obtuvo ningún beneficio con la denuncia, sino que, contrariamente, podría perjudicarle debido a la propia naturaleza y duración de este proceso judicial», añade la sentencia, que concluye que «la puesta en duda de la credibilidad de la denunciante en función de la existencia de motivos espurios en la presentación de la denuncia, en lógica, no se sostiene».