Un trabajador autónomo que realizaba trabajos forestales falleció el pasado 14 de agosto en Iurreta al caerle encima una rama y golpearle fuertemente la cabeza.
Según ha afirmado el sindicato LAB, que ha informado de este nuevo accidente laboral mortal, con el fallecimiento de este trabajador, D.S., se elevan a 36 las muertes en el trabajo en el Euskal Herria desde el inicio del año. LAB ha denunciado «firmemente» esta nueva muerte y ha mostrado su «apoyo y solidaridad» a familiares y allegados del trabajador.
Según ha precisado, en el sector forestal «los riesgos son grandes» debido al trabajo «con maquinaria peligrosa, en terrenos escarpados y climatología adversa», a lo que se unen «sus condiciones laborales cada vez más precarias». «Los beneficios económicos se imponen por encima de la salud y la vida de trabajadores y trabajadoras, también en este sector», ha añadido.
Causas del siniestro
Por ello, ha pedido investigar las causas de la muerte del trabajador «y también sus condiciones laborales y ritmos de trabajo», porque «ha de señalarse a los responsables».
«Nos parece preocupante y perturbador que los accidentes laborales aumenten año tras año. El aumento de los accidentes laborales es consecuencia de la política de precarización y la falta de control de las instituciones en materia de salud laboral», ha denunciado.
LAB considera que «adoptando medidas necesarias en prevención de riesgos laborales, y si el empleo creado fuera de calidad, los accidentes laborales no deberían por qué incrementarse».
En este sentido, ha exigido a las instituciones y a los gobiernos «que dejen de mirar hacia otro lado» y que, «de una vez, cambien de raíz las políticas de salud laboral, adopten medidas ante esta masacre y pongan en marcha políticas reales necesarias para evitar accidentes».
Por último, ha hecho un llamamiento a «participar en las movilizaciones que se organizarán para denunciar el último accidente laboral» y ha reivindicado «un modelo justo y un marco propio que tenga en cuenta la seguridad y salud de los trabajadores».