El Movimiento de Pensionistas de Euskal Herria reanudó este lunes sus concentraciones semanales en Bilbao para reclamar «pensiones dignas» y censurar que las autoridades no respondan a sus reivindicaciones «más urgentes».
El colectivo se concentró frente al Ayuntamiento de Bilbao, tal y como llevan haciendo desde 2018, en defensa de su tabla reivindicativa.
En la cita, portavoces del colectivo criticaron que no se dé respuesta a sus reivindicaciones «más urgentes» y censuraron que muchas personas se vean obligadas a prolongar su vida laboral para mejorar sus pensiones, «sobre todo mujeres que siguen trabajando en el servicio doméstico y cuidados».
Entre los objetivos para los próximo meses han vuelto a situar la mejora de las pensiones, en especial las mínimas hasta los 1.080 euros, así como reivindicar una mejora de los servicios sociosanitarios.