La imagen de esta semana muestra un rincón de naturaleza en Artxanda con un primer plano dominado por ramas retorcidas y desnudas, salpicadas de hojas rojas en forma de estrella que destacan con fuerza. Estas hojas, dispersas como pequeñas llamas, aportan el toque más vivo de la escena y sugieren un momento avanzado del otoño, cuando el árbol ya ha perdido buena parte de su follaje.
En el fondo se aprecia una mezcla de troncos, enredaderas y masas verdes de coníferas que crean una textura densa y algo salvaje. Abajo, una franja de vegetación baja y brillante actúa como borde natural, enmarcando la composición. El conjunto transmite una sensación tranquila y ligeramente melancólica, típica de esos paseos de temporada en los que el rojo del otoño se enfrenta al verde persistente del bosque.