El Día Mundial contra la Depresión, celebrado cada 13 de enero, busca visibilizar este trastorno mental que afecta a más de 280 millones de personas en el mundo, según la OMS. En el espacio Farmacia de Guardia de Radio Popular-Herri Irratia, se ha abordado un tema de gran relevancia social: la depresión. Juan del Arco, representante del Colegio Farmacéutico de Bizkaia, ha ofrecido una detallada explicación sobre la depresión, que afecta a más de 300 millones de personas en todo el mundo.
Juan del Arco ha destacado que la depresión no debe confundirse con una simple tristeza o episodios de desánimo puntuales. Para ser diagnosticada, debe incluir síntomas graves que alteren el funcionamiento normal de una persona. Entre estos síntomas se encuentran la apatía, la incapacidad para disfrutar, problemas de concentración, cambios en la motricidad y molestias físicas como dolor de cabeza o pitidos en los oídos. Además, ha señalado que esta enfermedad afecta a un 4% de la población mundial, siendo más prevalente en mujeres (6%) que en hombres (2%). A diferencia de otras patologías, la incidencia de la depresión no aumenta necesariamente con la edad, siendo especialmente común en la adolescencia y al inicio de la vida adulta.
Opciones de tratamiento
El tratamiento de la depresión debe ser integral. Existen medicamentos modernos, como los inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina, que mejoran la comunicación entre neuronas. Sin embargo, ha enfatizado que la medicación debe combinarse con psicoterapia. Este enfoque holístico incluye apoyo emocional por parte de profesionales y, en casos específicos, el uso de tratamientos electroconvulsivos bajo estricto control médico.
Atención a los más jóvenes
Juan del Arco también ha resaltado la importancia de detectar la depresión en edades tempranas. Save the Children, en el marco del Día Mundial contra la Depresión, ha lanzado una guía dirigida a padres y madres para identificar síntomas en niñas y niños. En los más jóvenes, la depresión puede manifestarse de manera diferente, incluyendo ansiedad, problemas de alimentación y trastornos de aprendizaje. La detección precoz y la intervención temprana son esenciales para evitar complicaciones futuras.
