Aritz Obregón, doctor en Derecho Internacional e investigador postdoctoral en la EHU, ha abordado en Desorden Mundial el principio de la prohibición del uso de la fuerza, considerado por muchos como «la piedra angular del Derecho Internacional». Desde la fundación de la ONU en 1945, los Estados han asumido dos compromisos fundamentales: resolver sus controversias por medios pacíficos y abstenerse de recurrir a la amenaza o uso de la fuerza armada en sus relaciones internacionales.
Según ha recordado Obregón, esta norma excluye la fuerza económica (como propuso sin éxito la URSS en su momento) y se limita a la fuerza militar, incluyendo hoy en día también los ataques cibernéticos.
Dos excepciones muy concretas
Pese a su carácter general, la Carta de Naciones Unidas contempla dos excepciones a esta norma: la autorización expresa del Consejo de Seguridad y el derecho a la legítima defensa.
«La legítima defensa solo es legal cuando hay un ataque armado, o uno inminente», ha explicado Obregón, quien ha subrayado que se trata de un derecho limitado, proporcional y subsidiario a la acción del Consejo de Seguridad. Mientras tanto, el Consejo debe actuar como garante de la paz y la seguridad internacionales.
Entre el cumplimiento y la crisis del sistema
Aunque en la actualidad existen numerosos casos de incumplimiento, el experto ha señalado que «la regla general es que los Estados ya no recurren a las armas», sino que negocian o acuden a tribunales internacionales.
No obstante, el sistema enfrenta una creciente tensión. «Los especialistas debatimos hoy si esta prohibición sigue vigente en un mundo con ciberataques, uso del espacio y bloqueo del Consejo de Seguridad», ha indicado el doctor.
Un documento para entender los retos actuales
Para quienes deseen profundizar, Obregón ha recomendado la lectura del artículo «El principio estructural sobre la prohibición de amenaza al uso de la fuerza, retos y peligros actuales», disponible en la Revista Electrónica de Derecho Internacional Contemporáneo.
El texto analiza las amenazas actuales a esta norma estructural y plantea las consecuencias de su debilitamiento para el sistema internacional
