

«Opereta» es el diminutivo italiano de «ópera» y se utilizaba originalmente para describir una obra más corta y quizás menos ambiciosa que una ópera. La opereta ofrece una alternativa a las representaciones operísticas de una forma accesible dirigida a un público diferente. La opereta se convirtió en una forma reconocible a mediados del siglo XIX en Francia, y su popularidad llevó al desarrollo de muchos estilos nacionales de opereta. Surgieron estilos distintivos en países como Austria-Hungría, Alemania, Inglaterra, España, Filipinas, México, Cuba y Estados Unidos. A través de la transferencia de opereta entre diferentes países, surgió el cosmopolitismo cultural en el siglo anterior. La opereta como género perdió favor en la década de 1930 y dio paso al teatro musical moderno. Entre los compositores importantes de opereta se encuentran Johann Strauss, Jacques Offenbach, Franz Lehar y Francisco Alonso.
La opereta nació en Francia a mediados del siglo XIX, para satisfacer la necesidad de obras breves y ligeras en contraste con el entretenimiento de larga duración de la cada vez más seria opéra comique. Evolucionó a partir de un género de música lírica propiamente francés, el opéra-comique. Suele decirse del compositor francés Louis-Auguste-Florimond Ronger (alias «Hervé») que es el padre de la opereta. Compuso en 1847 Don Quichotte et Sancho Pança, a menudo considerada la primera opereta.
Más tarde, la burguesía austriaca imitó el gusto parisino, y la opereta llegó a Viena. Fue así como nació la opereta vienesa, que presenta generalmente un argumento más serio y sentimental que las operetas francesas. Por un lado, si bien estas últimas tenían al cancán como su pieza bailable representativa; las vienesas, en cambio, apostaron por el vals, y tenían como representantes por excelencia a los Strauss, padre e hijo. Johann Strauss II (1825-1899), también llamado Strauss el joven, fue un compositor austriaco más conocido por sus valses, como por ejemplo El Danubio azul. Fue famoso durante su vida por toda Europa y Estados Unidos y fue conocido como el Rey del vals, pero también escribió muchas polkas, marchas, cuadrillas y operetas como Die Fledermaus y Der Zigeunerbaron.
Franz Lehár fue un compositor austrohúngaro, principalmente conocido por sus operetas. Aunque Lehár era húngaro, compuso la mayoría de sus obras en Austria. Compositor vanguardista, padre del impresionismo alemán, alcanzó su fama gracias a la hoy consagrada obra La viuda alegre, opereta de carácter bufo dividida en tres actos que gustó tanto al público como a la crítica por igual.
La opereta también llegó al mundo anglosajón, principalmente a Londres y Nueva York, donde fue esencialmente un género de importación. Con el tiempo, en Francia, la opereta influyó en la aparición de la revue (la revista) que, en Estados Unidos, junto a la opereta de imitación europea, llegó a generar el género del musical. Llevado al cine, el musical produjo espectáculos de gran fama y popularidad, como West Side Story (1957), adaptado a la gran pantalla en 1961, aunque los musicales estadounidenses se distinguen claramente de la opereta como un género aparte.
Si te gusta La Traviata, suscríbete en nuestros canales de podcast:
Y sigue a Radio Popular en las redes sociales:
- Sigue todas las noticias de Bilbao y Bizkaia en nuestro Facebook
- Conoce la radio desde dentro en nuestro Instagram
- Los titulares y los bacalaos del Athletic al minuto en X
- Revive los mejores bacalaos en YouTube
- Recibe las actualizaciones de nuestra programación y nuestras noticias en nuestro canal de Telegram
Sobre el origen de la opereta, es muy discutible. Para austriacos el origen es anterior, y está en el sienspel alemán. En España, la opereta fue una moda pasajera e influenciable en el teatro lírico nacional, la zarzuela. Pero no hubo ni autores, ni compañías especializadas, las compañías de zarzuela las estrenaba y difundía, ya españolas, o traducidas. Pero no entiendo que tiene que ver Francisco Alonso, autor de zarzuelas, revistas y comedias musicales, no operetas. El Lehar español, sin duda, fue Pablo Luna, el rey de la opereta, el que componía música «rubia». Otra cosa distinta es el calificativo, para evadir censuras, de muchas revistas musicales, como opereta moderna, o también zarzuela moderna. Nada que ver con esos géneros, simples revistas, o lo que también se designó, comedias musicales arrevistadas. En verdad, revistas con algún asunto romántico y algunos números de carácter dramático, y no sueltos co.o en la revista, con el consabido galán de
revista. Pero en España no existió la comedia musical plena. Opereta, ópera comique, zarzuela, singpiel, ballad ópera…son teatro lírico, con sus cantantes líricos. Comedia musical y revista, son teatro musical, con actores cantantes. Dos mundos muy diferentes y distantes. Musical es un adjetivo que se ha convertido en un sustantivo demasiado generalizante. Su nombre como género es Comedia Musical. Las nuevas generaciones detestan el calificativo comedia, y lo ignoran. Pero ha existido en todas partes y épocas. Ya Lope de Vega las escribía, sus comedias en música, para ser cantadas por actores. La comedia musical americana si tiene su origen, a principios del XX, en la opereta vienesa. La falta de cantantes líricos hizo que compositores germanos, compusieran sus obras para actores cantantes, y señalan 1916, como el estreno de la primera comedia musical plenamente americana.