


Marisa Fernández Zubiaur, secretaria de la Asociación Vecinal Uribitarte Anaitasuna, ha denunciado el incumplimiento por parte del Ayuntamiento de Bilbao de varias recomendaciones emitidas por el Defensor del Pueblo, Ángel Gabilondo. La situación, que afecta a los vecinos de la zona de Abando, continúa sin resolverse, a pesar de las reiteradas quejas por problemas de ruidos y convivencia.
Las recomendaciones del Defensor del Pueblo
El Defensor del Pueblo ha dictado seis recomendaciones para mejorar la situación en el distrito 6 de Abando. Tres de las cuales han sido aceptadas parcialmente por el consistorio bilbaíno. Pero las más urgentes, relacionadas con la regulación de los horarios de hostelería y la mejora de la accesibilidad en las calles, han sido rechazadas.
«El Ayuntamiento ha cumplido con algunas de las recomendaciones, como la instalación de sonómetros y campañas de concienciación, aunque los resultados han sido deficientes», asegura la representante vecinal. En especial, la medición del ruido ha sido «inconsistente, con sonómetros que han reportado lecturas erróneas y no han reflejado la realidad del volumen de ruido en las calles».
El problema del ruido y la saturación de las aceras
Los vecinos de Abando denuncian la dificultad de transitar por las aceras debido a la aglomeración de personas en la vía pública, especialmente en las zonas cercanas a bares y discotecas: «Hay calles que se llenan de gente hasta altas horas de la madrugada, lo que impide a los viandantes pasar de manera segura. Y la propuesta de regular los horarios de hostelería ha sido rechazada por el Ayuntamiento».
Además, Marisa Fernández destaca que la saturación de las aceras obliga a los transeúntes a caminar por la calzada, lo que aumenta el riesgo de accidentes: «Las calles deben ser para que las personas puedan transitar con seguridad, no para que se conviertan en espacios de consumo descontrolado«.
Incivismo y suciedad en las calles
La Asociación Vecinal también ha denunciado la creciente problemática de la suciedad en las calles, en especial los actos de incivismo como el botellón y la orina en la vía pública. Zubiaur pide que se instalen urinarios móviles en algunas zonas. Porque falta de infraestructuras adecuadas en las zonas de ocio continúa siendo un obstáculo para la convivencia: «La situación es insostenible. Hay calles en las que no se puede ni pasar debido al mal olor, y todo esto debido a la falta de medidas efectivas por parte del Ayuntamiento».
Las medidas que proponen los vecinos
La Asociación Vecinal Uribitarte Anaitasuna no cesará en su lucha por mejorar la situación de los vecinos: «Seguiremos denunciando esta falta de acción por parte del Ayuntamiento. Es un problema de salud pública, y la administración tiene que tomar medidas adecuadas». Estos vecinos piden la creación de un plan de inspección para regular la actividad nocturna en el distrito. Además, Zubiaur sugiere la posibilidad de sancionar a quienes incumplen las normas de convivencia, como los que orinan en la vía pública, con medidas como la limpieza de los espacios públicos como forma de castigo.