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El Surne Bilbao Basket tendrá esta noche (20.30 horas) la oportunidad de lamer las heridas que dejó el Baskonia en Miribilla. No será ni el mejor rival ni el mejor momento. Unicaja ha huido de los puestos de descenso tras vencer a Obradoiro y Betis, la llegada de Ibon Navarro y los fichajes de Matt Mooney y Cameron Oliver ha permitido a los malagueños mirar más hacia arriba que hacia abajo.
El buen momento de los andaluces también se ha traslado en la Basketball Champions League. Unicaja disputará los cuartos de final ante Manresa para dilucidar a uno de los equipos que disputará la Final Four que se diputará en el Bilbao Arena.
Los bilbaínos no podrán contar con David Walker debido a un cuadro lumbar agudo acompañado de un edema óseo en apofisis transversa L3 izquierda. Habrá que esperar la evolución de la dolencia del norteamericano, pero deja la posición de alero muy tocada. Tras la huida de Bigote el puesto se ha resentido y en Málaga Álex Mumbrú solo contará con Álex Reyes.
Además, Rafa Luz fue padre y no viajó con el equipo. Se espera que llegue al encuentro, pero no ha estado en la dinámica del grupo desde el pasado domingo. Misión muy difícil, pero también oportunidad para que la plantilla muestre las virtudes que le llevaron a enlazar 7 victorias. Se echa en falta la defensa, pero sobre todo la producción ofensiva. De nada sirve lamentarse por los que ya no están y otros deben asumir el reto.
Colchón sobre el descenso
Dificultades por tanto para un Surne Bilbao Basket que sigue en tierra de nadie. No deben acostumbrarse los MIB al sabor de la derrota. De los últimos 5 partidos han perdido 4. El colchón sobre el descenso aún es sólido con 3 triunfos sobre el grueso de 5 equipos que aventajan a un Betis ya muy lejos a 5 victorias de los de Miribilla..
