El Consejo Económico y Social Vasco (CES) ha presentado este viernes la Memoria Socioeconómica de la Comunidad Autónoma del País Vasco (CAPV) de 2023 en su sede de Bilbao.
En el repaso de los principales indicadores sociales y económicos del 2023 destacando un resumen de algunas de las condiciones y recomendaciones recogidas en el informe.
Por un lado, en lo que al ámbito demográfico, la CAPV sigue inmersa en una tensión demográfica provocada por la baja natalidad y el progresivo envejecimiento de la población. A pesar de que los saldos migratorios positivos compensaron esas decadencias en el año 2023, el crecimiento natural es negativo.
En lo referente al ámbito económico, el PIB de Euskadi ha registrado un crecimiento del 1,8%. Además, los principales indicadores económicos han mostrado un crecimiento en la zona euro.
También, a pesar de que en 2023 la inflación se ha moderado con un +3,1% frente al +5,4% en el año 2022, se mantienen índices de precios por encima de los valores previos a 2021. Lo que supone un problema para la repercusión de la ciudadanía vasca.
En cuanto al empleo y las relaciones laborales, la evolución ha sido en general positiva y la mayor parte del empleo se ha creado en el sector servicios y, en menor medida, en la industria. Pero, la elevada temporalidad en el sector público y la baja tasa de actividad siguen presentando un problema en Euskadi, especialmente entre las mujeres.
Condiciones de vida
En lo referido a las condiciones de vida, el presidente de la Comisión de la Memoria Socioeconómica, Jon Barrutia, ha recalcado que “Euskadi se mantiene en posiciones elevadas en los rankings internacionales de calidad de vida, aunque algunos indicadores alertan sobre problemas, como que el 12,6% de las familias se encuentre en situación de pobreza energética, que casi el 8% muestran retrasos en los pagos de la vivienda principal, o que el 21,4% declare no poder afrontar gastos imprevistos”.
Respecto al mercado de la vivienda de Euskadi, sigue siendo un desafío para la sociedad. En el informe, se visualiza cierto estancamiento del mercado inmobiliario en el 2023, pero actualmente los precios siguen subiendo y la oferta de vivienda en alquiler continúa siendo insuficiente.
Por su parte, el CES ha celebrado que Euskadi esté considerada como base de excelencia regional en el Panel europeo de indicadores de innovación regional.
“Es necesario elevar el porcentaje de pymes innovadoras e incrementar la inversión en actividades para la innovación como el diseño, el marketing, la gestión de la propiedad intelectual e industrial o la formación. Otro ámbito de mejora es el impacto económico de la innovación en el empleo y en las ventas ya que es menor que el que registra la media europea” ha recalcado Barrutia.
En este sentido, el Consejo apela a la necesidad de mantener el esfuerzo presupuestario para garantizar unos niveles de inversión aceptables, así como de aprovechar los fondos europeos «Next Generation» para fortalecer los servicios públicos y la inversión pública y privada.