El lehendakari, Imanol Pradales, ha afirmado que es «desesperante» que no se acaben las obras del TAV en Euskadi, una de las sólo cinco comunidades en el conjunto del Estado que no tiene tren de alta velocidad, y cree que hay que decir «basta» porque «siempre hay buenas palabras y siempre hay mucha voluntad política» por parte de las instituciones del Estado, «pero esto no acaba de avanzar».
Pradales ha lamentado que Euskadi no cuente con una conexión de alta velocidad cuando está dentro de un corredor transeuropeo, en la frontera entre Francia y España, teniendo además una «gran relación de carácter industrial, logístico, económico hacia el norte de Europa y también hacia el sur peninsular».
Tras recordar que todos los tramos del TAV que se le encomendaron al Gobierno vasco están ejecutados o a punto de acabar, los tramos que quedaron en manos del Gobierno español «siguen como siguen», cuestión que ha trasladado tanto públicamente como directamente al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.
«Siempre tenemos retrasos, siempre tenemos nuevos estudios que hacer, nuevas cuestiones técnicas que hacer. Es desesperante«, ha dicho, para remarcar que «hay que poner ahí el foco, porque la competencia en la alta velocidad no es vasca, es del Estado».
«Me encanta que haya muchas comunidades autónomas ya conectadas, pero a mí lo que me preocupa es Euskadi, ya que es un factor que incide directamente en el desarrollo económico de Euskadi, en nuestra movilidad y, por lo tanto, en que vayamos a mejor o nos podamos quedar descolgados y perdamos el tren, nunca mejor dicho, del futuro», ha advertido, para instar a decir «¡basta!» y que «de una santa vez venga el tren de alta velocidad, llegue a Euskadi y nos conecte».
Pero si no querían el TAV allí, de que te quejas ahora.