Después de 17 partidos de LaLiga disputados, el Athletic calca los números de la temporada anterior con 32 unidades en su casillero. Es la segunda mayor puntuación de la historia del Athletic, solo superada por los 33 puntos de la 13/14 en la que se alcanzó la Liga de Campeones. Los tres mejores cursos a estas alturas, numéricamente hablando, han sido bajo la batuta del ‘ilustre’ Ernesto Valverde.
El Athletic ha presentado su candidatura a la Champions con un pleno de victorias en una semana de tres partidos. Remontada en Vallecas, triunfo de calidad ante el Real Madrid y victoria de madurez ante el Villarreal de Marcelino que, a priori, es el rival favorito para la cuarta plaza al no tener otra competición en el horizonte. Si bien es cierto que el Villarreal debe recuperar dos jornadas ligueras, no lo es menos que los leones han afianzado la cuarta plaza con 6 puntos más que los de La Cerámica.
A día de hoy los números avalan a los más optimistas que sueñan con ver a un Athletic campeón de liga porque el líder se encuentra a tan solo 6 puntos, que a estas alturas de campeonato es un margen estrecho para lo que suele ser habitual. Para los más pesimistas o cautelosos, la séptima plaza, la que te deja fuera de competición continental, se halla a 8 puntos y la marca Osasuna al que hay que rendir visita en el último partido de 2024. Buenas noticias lo mires por donde lo mires.
Prueba de madurez
La victoria ante el Villarreal demuestra la madurez de un equipo que perfectamente se podía haber despistado con los halagos recibidos tras la victoria ante el Real Madrid. Valverde les aprieta para que no aflojen y los jugadores han dado un paso al frente en regularidad a pesar de contar con una plantilla joven. Para Marcelino García Toral, ganar la Copa del Rey les ha dado un plus de confianza que les ha ayudado a crecer en todos los sentidos.
El equipo bilbaíno sigue sacando chispas a las rotaciones y apenas nota los cambios. Los que entran desde el banquillo rinden a buen nivel y eso eleva las prestaciones del grupo. Jugar se ha puesto muy caro y esa es una gran noticia que el Txingurri está sabiendo gestionar. La dosificación de minutos tiene que ser clave cuando lleguen los momentos decisivos de la temporada.
Diez años no son nada
Parece mentira que ya hayan pasado 10 años del debut de Iñaki Williams con el Athletic. Mucho ha llovido, especialmente estos días, desde su debut el 6 de diciembre de 2014 en San Mamés con derrota ante el Córdoba. Nunca ha tenido un camino fácil, ni en su estreno de la mano de Valverde, porque su actual entrenador le quitó al descanso y metió a Iraola. Golpe duro que seguro le sirvió para endurecerse y convertirse en el líder que es hoy en el equipo.
El mayor de los Williams tenía ganas de celebrar su década prodigiosa con un buen partido y sobre todo, con bacalao. Lo buscó sin descanso, a veces en exceso, hasta que obtuvo su recompensa tras un gran servicio de Oihan Sancet, de nuevo el mejor, para dejarle dentro del área y poder batir así a Conde que cayó lesionado en la rodilla en esa jugada. Día grande para un grande del Athletic que se coloca a 3 encuentros de ingresar en el top 10 histórico de partidos jugados y se acerca a Guerrero e Iriondo como bacaladero.
