La tradición de tomar 12 uvas al compás de las campanadas es un clásico de la Nochevieja, y en Euskadi esta costumbre también tiene su propio encanto. Aunque el ritual suele seguirse de manera tradicional, cada vez más personas buscan formas originales y divertidas de despedir el año con las uvas en mano. Aquí te presentamos algunas de las maneras más curiosas de cumplir con este rito tan especial.
Uvas congeladas en cócteles
En lugar de comer las uvas al natural, muchas personas optan por congelarlas y usarlas como hielos para cócteles. Esto no solo mantiene la bebida fría, sino que permite un brindis más moderno y glamuroso sin perder la esencia de la tradición.
Doce uvas, doce deseos escritos
En ciertas regiones de España y México, además de comer las uvas, cada una va acompañada de un deseo escrito en un pequeño papel. Al final de las campanadas, los deseos se guardan hasta la próxima Nochevieja para comprobar si se cumplieron.
Uvas pintadas o decoradas
En algunas reuniones, especialmente las más familiares o creativas, las uvas se decoran con caras sonrientes o se pintan con colorante comestible. Esto añade un toque festivo y arranca sonrisas mientras se sigue la cuenta regresiva.
Competiciones de velocidad
Para añadir emoción a la tradición, hay quienes convierten las campanadas en una carrera contrarreloj para ver quién logra comer las 12 uvas más rápido. Aunque no es apto para los más prudentes, esta versión asegura risas y anécdotas.
Uvas empapadas en chocolate o txakoli
En busca de un giro dulce, algunas familias preparan las uvas bañadas en chocolate o incluso marinadas en txakoli. Esta variante combina el espíritu festivo con un toque gourmet que eleva la experiencia.
Uvas en una sola toma
En Japón, aunque no es una costumbre local, algunos han adoptado la tradición española pero con un giro peculiar: intentan comerse las doce uvas de una sola vez, lo que resulta en situaciones muy divertidas.
Uvas virtuales
En la era digital, quienes no pueden estar juntos físicamente celebran con uvas virtuales. Desde emojis hasta videos pregrabados con campanadas, esta versión moderna mantiene viva la conexión y la tradición de comer las uvas en nochevieja.
Sea cual sea tu manera de tomar las uvas, lo importante es mantener el espíritu festivo y la ilusión por un nuevo comienzo. Urte Berri On!