
Unai Simón ha ofrecido sus impresiones de cara al nuevo curso. Un año en el que el guardameta de Murgia asoma como titular, tras la marcha de Julen al Valencia en calidad de cedido. En todo caso, el propio Unai se ha encargado de negar la mayor. Así, y respecto a si conoce las intenciones de su entrenador respecto a la portería, ha a afirmado que «no lo sabía el año pasado y no lo sé este año. Aceptar las decisiones de Ernesto, jugando o sin jugar».
Sí ha admitido que es alguien «con mucha suerte» de pertenecer al Athletic. «La vida que tengo ahora es por estar aquí, soy muy afortunado. Con la familia, la pareja y amigos cerca todo es mucho mejor. Y que se priorice el Athletic (en referencia a la continuidad de Nico) habla muy bien de lo que es el club, del proyecto que tenemos, del buen hacer que tiene la gente, de nuestros aficionados… La repercusión es enorme para la cantera, ya que demuestra que puedes ser top aquí«.
Ya en clave colectiva, ha remarcado su tranquilidad, y la de todo el equipo y cuerpo técnico, tras una pretemporada mala en cuanto a resultados, que Unai califica de «subjetivos». «Afrontamos la temporada con mucha ilusión. Tenemos que ser ambiciosos, confío en que vamos a seguir en la misma dinámica que dejamos la pasada temporada. Plantar cara, sea el rival que sea, demostrar que somos mejor equipo y en nuestra casa no perder ningún partido. El domingo tenemos que conseguir los tres puntos como sea«.
Una campaña en la que el equipo regresa a la Champions, lo que dispara la ilusión en el entorno y, por supuesto, en el vestuario. «Estamos con muchas ganas de hacer ver que estamos aquí para poder rendir al máximo nivel y poder disfrutar de la temporada. Vamos a pelear por plaza europea y estar lo más arriba posible, como siempre. Ojalá consigamos grandes cosas«.
Por último, ha hecho referencia al Villarreal-Barça que la liga pretende llevar a Miami: «Los jugadores somos la cara visible en el campo, pero sin los aficionados el fútbol no existiría. El fútbol tiene que ser de ellos, lo contrario es una falta de respeto».