Agentes de la UCRIF de la Brigada Provincial de Extranjería y Fronteras detectaron el pasado 29 de octubre en Bilbao a dos hombres que empleaban medios tecnológicos fraudulentos para superar el examen teórico del carné de conducir. La actuación tuvo lugar en las instalaciones de la Jefatura Provincial de Tráfico, en la calle Barroeta Aldamar. Allí los agentes realizaban controles rutinarios para evitar suplantaciones de identidad o uso de dispositivos prohibidos.
Comportamiento sospechoso durante la prueba
Durante el examen, los policías observaron a dos varones con camisas idénticas —una gris y otra azul— que mostraban una actitud nerviosa y postura “antinatural”, inclinando el pecho hacia la pantalla. Su sudoración excesiva y las continuas miradas hacia los agentes despertaron las sospechas.
Al finalizar la prueba, los funcionarios los interceptaron y notaron un pequeño orificio a modo de mirilla en las camisas. Tras pedirles que se desabrocharan, comprobaron que ambos llevaban teléfonos móviles adheridos al pecho. Estaban conectados en llamada activa, presumiblemente con una persona que les dictaba las respuestas.
Teléfonos ocultos y pinganillos
En el registro posterior se hallaron dispositivos receptores con luz azul parpadeante y pinganillos en la oreja derecha, elementos habituales en fraudes de este tipo. Los implicados explicaron, en un castellano limitado, que alguien les había proporcionado las camisas y los teléfonos esa misma mañana junto con instrucciones precisas.
La sanción propuesta asciende a 500 euros para cada uno y seis meses de prohibición para volver a examinarse. La Policía subraya que este tipo de intentos de engaño son cada vez más sofisticados y frecuentes en las pruebas teóricas para la obtención del permiso de conducción.