El Consejo de Administración del Servicio Público de Empleo-Lanbide ha aprobado en su última reunión de la legislatura ayudas por valor de 66 millones de euros para financiar acciones orientadas a la creación y la mejora del empleo.
Estas ayudas se destinarán especialmente a colectivos vulnerables con dificultades de inserción a través de la creación y el sostenimiento de empresas de inserción, así como a las personas ocupadas y desempleadas que quieran mejorar sus perspectivas laborales gracias a programas de formación.
Con el objetivo de posibilitar el acceso de los colectivos más desfavorecidos o en riesgo de exclusión al mercado laboral ordinario, Lanbide ha aprobado una ayuda de 14,5 millones de euros para la creación y sostenimiento de empresas de inserción, según ha informado el Gobierno Vasco en un comunicado.
Estas subvenciones están orientadas tanto a la puesta en marcha de este tipo de entidades, como a los estudios que evalúen su viabilidad y la posibilidad de apertura de nuevos mercados. Serán también beneficiarias finales de estas ayudas, gracias al mantenimiento de sus puestos de trabajo, las personas que aprenden una profesión a través de estas empresas, así como el personal técnico de acompañamiento en la producción y la inserción.
El pasado año, esta convocatoria se dotó con 12,3 millones de euros que se vieron ampliados en otros 2,7 millones para poder atender todas las solicitudes recibidas. En esta ocasión también se contempla que sea necesario incrementar la dotación habilitada. Se estima que en los últimos tres años, unas 40 empresas de este sector se han beneficiado de estas ayudas, generando unos 900 puestos para la inserción, más otros 175 de técnicos de acompañamiento.
Formación de personas desempleadas
A través de la financiación de los planes de formación, Lanbide pretende dar respuesta a las necesidades detectadas con una oferta formativa que está dirigida prioritariamente a personas trabajadoras desempleadas e inscritas como demandantes de empleo.
El importe económico de esta convocatoria es de 33 millones de euros, que se distribuirán entre los tres territorios históricos y por tipo de formación, acreditable o no acreditable. Podrán optar a esta subvención entidades de formación privadas y públicas, debidamente registradas, que ofrezcan acciones formativas contempladas en el ‘Informe para especialidades programables 2024-2025’ publicado por Lanbide.
Asimismo, el Consejo de Administración de este organismo público ha aprobado dos programas que a partir de este momento pasar a formar parte de sus convocatorias estructurales: el plan de contratación de personas jóvenes para proyectos de investigación, y el de formación en cuidados.
A su vez, se ha aprobado la convocatoria para financiar la oferta formativa de personas trabajadoras ocupadas para 2024 y 2025, que incluye acciones orientadas tanto a la mejora de competencias y cualificaciones, como a la recualificación de las personas trabajadoras a nivel individual.
Esta convocatoria está dotada con 14,8 millones de euros, y podrán participar en ella todas las personas trabajadoras de Euskadi, los cuidadores no profesionales de personas en situación de dependencia, el personal al servicio de las administraciones públicas, con un límite máximo del 10% del total, y los trabajadores pertenecientes a la plantilla de las entidades titulares de esos planes de formación, hasta un límite también del 10% del total.
Asimismo, podrán participar en el programa las personas desempleadas inscritas en Lanbide como demandantes, en otro Servicio Público de Empleo o en el Fichero de Garantía Juvenil. Se espera que con la cantidad prevista, se pueda formar a 37.000 personas.
Contratación de jóvenes
Ikerlan, continuación del programa Investigo, que durante los últimos años ha sido financiado con fondos europeos, pasa en 2024 a ser una convocatoria estructural de Lanbide. A través de ella, el Servicio Público de Empleo ofrece ayudas económicas a las empresas vascas para que contraten a jóvenes desempleados, con el objetivo de innovar e investigar en los campos de la sanidad, la transición ecológica, la economía verde, la digitalización de los servicios o la denominada ‘data science’.
Los contratos de trabajo deberán tener una duración mínima de doce meses, a jornada completa, y la cuantía de las subvenciones servirá para financiar hasta dos años los costes laborales y salariales de las personas contratadas, que deberán de tener más de 16 y menos de 30 años. Con un presupuesto de 2,5 millones de euros, se estima financiar unos 44 contratos a lo largo de 2024.
Lanbide también ha incorporado como propio el programa Mentsad-Zainlab, dirigido a la realización de actuaciones formativas en el ámbito de los cuidados, y que está dirigido prioritariamente a personas trabajadoras ocupadas.
Con un importe de 900.000 euros para los años 2024 y 2025, podrán optar a esta subvención entidades de formación privadas o públicas debidamente registradas.
Además, las entidades que opten a recibir estas ayudas deberán contar con experiencia en impartir certificados de profesionalidad en atención sociosanitaria y/o en contenidos relacionados con el sector de cuidados. Las acciones formativas, en las que se estima que participarán unas 200 personas, deberán ser impartidas en la modalidad mixta de presencial y teleformación.