Bilbao
El consejero de Industria, Transición Energética y Sostenibilidad, Mikel Jauregi, ha defendido este viernes que el Gobierno Vasco está trabajando en «el control y seguimiento» de las instalaciones de las empresas Sader y Profersa, ubicadas en Bilbao, así como «en la búsqueda de soluciones que permitan ubicar estas plantas en un entorno más apropiado para su actividad industrial». «Mantenemos el empeño de facilitar una reubicación. No hay abandono. Estamos trabajando en estos dos objetivos para dar respuesta a las y los vecinos de la zona», ha insistido.
En el pleno de control al Gobierno que está celebrando la Cámara vasca, el parlamentario de Sumar, Jon Hernández, ha preguntado al lehendakari, sobre la situación de contaminación por parte de las empresas Sader y Profersa, «que afecta a la salud y al bienestar de cientos de vecinos y vecinas de Bilbao».
Hernández ha asegurado que se trata de «un problema de contaminación del aire y también de salud pública» porque las empresas Sader y Profersa, ubicadas «en pleno casco urbano de Bilbao, están generando una serie de afecciones importantes» en varios barrios de Bilbao e incluso en poblaciones limítrofes a la capital vasca.
Años protestando
Para Sumar, esta situación responde a la «inoperancia por parte de las instituciones, y en concreto por parte del Gobierno Vasco», y ha destacado que los vecinos «llevan años protestando contra esta situación» y en los últimos días se han concentrado en la calle «exigiendo soluciones inmediatas porque aseguran que llevan años de promesas incumplidas y afirman que se sienten abandonados por las instituciones».
En lugar del lehendakari, el titular vasco de Industria ha sido quien ha contestado la pregunta de Sumar. Según ha asegurado, «el Gobierno Vasco está trabajando en el control y seguimiento en las instalaciones de Zorrotza, y también en la búsqueda de soluciones que permitan ubicar estas plantas en un entorno más apropiado para su actividad industrial».
«Mantenemos el empeño de facilitar una reubicación a las empresas Sader y Profersa. No hay abandono. Estamos trabajando en estos dos objetivos para dar respuesta a las y los vecinos de la zona», ha insistido.
Rigor
El consejero ha insistido en que «comprende y comparte la preocupación» pero ha pedido a Sumar que sea «riguroso» porque «no se puede afirmar que la salud de cientos de vecinos y vecinas estén en juego». «No es cierto que hayamos abandonado a la ciudadanía, lo desmiento», ha subrayado.
Según ha asegurado, «las instalaciones de Sader y Profesa están teniendo un seguimiento continuado por parte de los técnicos inspectores de Medio Ambiente» y ha señalado que «para mejorar este seguimiento se han incorporado dos nuevas unidades móviles de medición del aire» que controlan la calidad del aire «las 24 horas del día».
«Como no puede ser de otra forma, seguimos las directrices de la normativa europea en la materia; la Directiva de Misiones Industriales. En base a esta normativa hacemos la programación de las visitas de seguimiento, los aspectos a fiscalizar, los criterios para considerar un incumplimiento y en qué momento se puede tomar medidas correctoras», ha informado.
En este sentido, ha recordado que este verano se ordenó «la paralización inmediata de la actividad de Profesa». «Por lo tanto, lo que usted dice no es cierto», ha insistido a Sumar.
REUBICACIÓN DE LAS PLANTAS
También ha explicado que el Gobierno Vasco está realizando gestiones para «reubicar las plantas en espacios más adecuados para el desarrollo industrial, fuera de entornos residenciales».
Jauregi ha informado de que en el caso de Sader, «se dieron pasos» para permitir la implantación de la planta en Zierbena, en una parcela portuaria, y posteriormente en Ortuella; y en el caso de Profesa se planteó una ubicación en Legutio. «Estas operaciones no se pudieron materializar y en la actualidad se está trabajando en una nueva alternativa en Zierbena, que cuenta con el certificado de compatibilidad urbanística del ayuntamiento», ha indicado.
En este sentido, ha señalado que la documentación está siendo valorada por los servicios técnicos y prevé que se pueda someter a información pública «en breve». «Una vez completado este proceso se procederá a la misión de una declaración de impacto favorable y a la Autorización Ambiental Integrada», ha añadido.
Por último, ha reiterado que el Gobierno Vasco continúa trabajando para reubicar Sader y Profesa fuera de un entorno residencial y «mientras tanto», ejerce sus competencias «con rigor».
«Vamos a contar con todas las garantías ambientales. Seguiremos haciendo un control exhaustivo de la actividad de las empresas y trabajando para que se pueda producir la reubicación a la mayor brevedad posible», ha concluido.
