La pasada semana los Gasolinos viajaron hacia su nuevo fondeadero frente al Museo Marítimo, donde quedarán mientras se realizan los trámites necesarios para decidir su futuro. Un carpintero de ribera y dos capitanes de la marina mercante han adquirido las embarcaciones para evitar su deterioro y darles una segunda vida. Estas personas tienen una estrecha relación con el Gasolino y su intención es desarrollar un proyecto de cuidado y mantenimiento para que en un futuro puedan desarrollar actividad en la ría. Una vez rescatados en lugar seguro, estarán sujetos a vigilancia constante. Por ejemplo, cuando llueve alguien se tiene que encargar de achicar agua.
Patrimonio Industrial de Bizkaia
Desde la asociación vecinal Erandioko Auzokideok llevan años solicitando una especial protección para estas embarcaciones como parte del Patrimonio Histórico industrial de Bizkaia. Porque sin ellos la industrialización de la Ría hubiera sido imposible. Era el transporte que enviaba los trabajadores a los astilleros y la industria siderúrgica de la margen izquierda desde la margen derecha. Kike Prada es el presidente de esta asociación. Y nos ha comentado que «los gasolinos eran la Intermodal de la expansión industrial de Bizkaia desde hace más de 100 años. Hay multitud de testimonios emotivos, de historias y vivencias del Gasolino. Es necesario recopilar una memoria histórica en torno a todos estos hechos». De la misma manera que se ha conservado la Grúa Carola o el Alto Horno Mari Angeles. ¿Por qué no se conserva el Gasolino? : «No sé si los responsables de las instituciones son demasiado jóvenes y por eso no conocen estas historias. En la Diputación nos han dicho que estas embarcaciones no tienen ningún valor. Y yo creo que esta respuesta se debe más a la ignorancia que a la mala fe».